Pronunciamiento de ACIN – Cxhab Wala Kiwe frente a la actual crisis del Covid-19
El pueblo indígena Nasa representado en la zona norte del departamento del cauca por la ACIN – CHXAB WALA KIWE, con sus 22 autoridades ancestrales indígenas y planes de vida, ha librado una lucha histórica por su pervivencia como pueblo y por el reconocimiento como sujeto colectivo de especial derecho ante el estado. Su objetivo ha sido el desarrollo del gobierno conforme a usos y costumbres propias, accionar que se refleja en la constitución política de 1991 en los artículos 7,10,13 63, 246, 287, 330 y en la declaratoria de derechos humanos y tratados internacionales.
En ese orden se expidió el Decreto 982 de 1999, como declaratoria de la emergencia social, cultural y económica de los pueblos y sus respectivas autoridades indígenas del Cauca; frente al constante riesgo que vivíamos a raíz del conflicto social y armado, amenazas, asesinatos, el sistema de mercado y la exclusión social y política, al igual que se adoptaban mecanismo en relación a la territorialidad, el medio ambiente, los derechos humanos, desarrollo de las normas constitucionales, economía y seguridad alimentaria. En ese sentido jurisprudencialmente se ordenan a todas las autoridades prodigar un trato especial (favorable) a grupos y personas que se encuentran en condición de vulnerabilidad o en situación de debilidad manifiesta (Sentencia T-235/11, T-025/04 y Auto 004/09.)
Con ello los pueblos indígenas hemos estado en una declaratoria de Emergencia constante y en riesgo eminente mucho antes de la declarada en el decreto 417 de 2020 por el gobierno colombiano a raíz del Corona Virus, Covid -19. Frente al cual hemos venido desarrollando la Minga hacia a adentro con acciones expresas en la resolución No. 01 de 2020, y las demás resoluciones locales de las 22 autoridades de la zona norte, para prevenir los contagios.
Suspendimos reuniones, mingas, asambleas, fiestas, bingos, espacios deportivos y toda actividad que implique reuniones y aglomeración. Hemos realizado cierre de fronteras y fortalecido los controles territoriales, restringiendo la entrada y salida del personal.
Estamos trabajando en el Nasa Tul (huertas familiares y comunitarias) que garantizan nuestra autonomía alimentaria en el marco de los sistemas propios; disponiendo todo nuestro equipo médico, personal de salud, dinamizadores comunitarios y guardia indígena en las diferentes instancias organizativas, trabajando diariamente en las fases de prevención, mitigación y atención frente a la emergencia.
Así como hemos dado la directriz de que cada persona, familia y comunidad debe auto cuidarse en su espacio de vida, manteniendo la calma y realizando acciones preventivas mediante el consumo de alimentos propios, fortalecimiento cultural, higiene personal siguiendo recomendaciones de los sabedores y autoridades ancestrales en cada territorio.
No obstante, denunciamos hostigamientos de parte de actores armados en nuestros territorios que quebrantan el control territorial, no respetan nuestras medidas, y entorpecen nuestras acciones frente a la contingencia, por ver en esto una oportunidad para desestabilizar y ganar posiciones impulsando una guerra absurda que aún campea, en el marco de los diferentes asesinatos selectivos que sufre nuestro país. No compartimos el accionar armado que estos grupos realizan en nuestros territorios afectando la tranquilidad y el bienestar de nuestras comunidades.
Al tiempo que denunciamos la insuficiencia de las medidas económicas y el escaso apoyo de parte del gobierno nacional, regional y local, para la adecuada implementación de nuestras medidas, sin ninguna asignación presupuestal específica para su implementación en los pueblos indígenas, según nuestras disposiciones de gobierno propio.
Exigimos que se nos asigne prontamente un recurso para este tema como es deber constitucional y deuda histórica del estado colombiano, frente a la constante emergencia social y humanitaria que vivimos los pueblos indígenas. Esto en una metodología concertada que respete nuestra autonomía territorial y nuestra jurisdicción especial ganada a pulso con la sangre de nuestros ancestros y mayores.
Rechazamos las declaraciones que buscan instrumentalizar políticamente la actual crisis, como las realizadas por el gobierno nacional que agudizan las tensiones con Venezuela, que desvían la atención de asuntos urgentes por atender y que al mismo tiempo entorpecen la capacidad gubernamental de hacer frente a la pandemia, afectándonos directamente como pueblos hermanos.
Resaltamos a toda la opinión pública que somos comunidades vinculadas a la tierra, productoras de alimentos indispensables y con capacidad de brindar nuestro apoyo a los demás sectores sociales vulnerables en el marco de esta pandemia, con quienes nos solidarizamos en búsqueda de encontrar una cura a esta enfermedad que azota a la humanidad, y que se agrega al problema mayúsculo de sentirnos superiores a la madre naturaleza.
Por ultimo hacemos un llamado a que tomemos este momento como una oportunidad de reconciliación con ella, así como entre toda la humanidad, sintiendo desde el corazón para re direccionar el camino por el que transitamos como especie, buscando soluciones reales y colectivas a problemas que nos competen a todos en temas de familia, economía, política, medioambiente y crecimiento espiritual del mundo entero.